Aunque ofrece enormes beneficios, la digitalización puede traer también el riesgo de ser víctimas de engaños. Tiendas en línea que esconden fraudes, correos electrónicos que buscan robar nuestros datos y soportes técnicos falsos, son algunos de los delitos informáticos más usuales, y que es necesario conocer para no caer en la trampa.
No, ¡no te apresures a abandonar el celular ni a apagar la computadora! La información es la mejor aliada para evitar caer en la trampa. Por eso, te invitamos a seguir leyendo y conocer más sobre el phishing.
¿Qué es el phishing?
Como los pescadores, que tiran un anzuelo al mar, en esta forma de engaño, los estafadores envían correos electrónicos o mensajes de texto y WhatsApp falsos para intentar que las personas les entreguen su información personal y financiera.
Por ejemplo, podrían decir que nuestra cuenta de Netflix fue bloqueada, y que necesitamos completar un formulario para recuperar el acceso. Creyendo que esto es verdad, muchos terminan compartiendo datos privados como los números de las tarjetas o las contraseñas de la cuenta bancaria.
¿Por qué esto es un problema? Si uno se convierte en víctima del phishing, puede perder su privacidad, sufrir el robo de dinero o incluso ver comprometida su identidad.
4 claves para evitar ser engañado
Aunque las estafas virtuales son muy usuales, hay estrategias que pueden evitar que seamos víctima de este tipo de delitos. Tomá nota:
1) Prestar atención a los detalles
A simple vista, las comunicaciones de phishing podrían no diferenciarse de un correo o mensaje auténtico. Sin embargo, hay algunos detalles que podrían advertirnos:
– El saludo no está personalizado con tu nombre y/o apellido.
– El cuerpo del mensaje tiene errores de redacción, de ortografía y/o de puntuación.
– El mensaje te trata por momentos de “usted” y luego cambia al “vos”.
– El correo llega desde una mail de Hotmail, Outlook o Gmail, en vez de una cuenta con el nombre de una empresa.
– Escriben desde una empresa de la que no se es cliente, por ejemplo, un banco en el que no se tiene abierta una cuenta.
– Asegura que alguna cuenta personal fue suspendida o bloqueada.
– Se pide hacer clic en un enlace para actualizar algunos datos personales.
Este último punto es especialmente importante. Aunque una compañía podría comunicarse por correo electrónico, las organizaciones legítimas no envían vínculos a través de los que brindar información personal. En estos casos, piden presentarse en la institución, o ingresar con usuario y clave desde su página web oficial.
2) Revisar que estén los indicadores de seguridad
En los tiempos que corren, podría haber situaciones en las que no podamos evitar tener que completar información personal a través del celular o la computadora. Si este es el caso, antes de brindar algún dato, es recomendable chequear que:
- La dirección del sitio web (URL) comienza con https://. La letra “S” es clave, ya que es lo que indica que la transmisión de información será segura.
Por ejemplo: https://efectivamente.com.ar/
- Junto a esa misma dirección del sitio web, o en la parte inferior de la página, aparece un candado cerrado. Esto demuestra que una página de internet es legal y que los pagos o transferencias de dinero que hagamos a través de ella, serán seguros.
3) Proteger la computadora y el celular con programas de seguridad
Es importante tener instalado un antivirus. También ayuda mantener actualizadas las aplicaciones de correo electrónico, del banco y la billetera virtual (desde la configuración pueden programarse para que esto se haga automáticamente).
Esto aumenta las chances de que las apps puedan reconocer las amenazas de seguridad más nuevas.
4) Proteger las cuentas con varios sistemas de autenticación
Normalmente tenemos un solo sistema de identificación, como un PIN, una pregunta de seguridad, o el acceso mediante huella digital o reconocimiento facial.
Aunque estos sistemas son buenos en sí mismos, cuando se los combina para poder acceder a información personal y financiera, se agregan capas de seguridad. Por ejemplo, se puede configurar el teléfono para que, antes de ingresar a la billetera virtual, pida poner la huella digital y completar una contraseña.
Como ves, existen muchas estrategias para evitar caer en la trampa del phishing. Pero, ante la duda, evitá abrir el mensaje o los enlaces. Lo recomendable siempre es comunicarse uno mismo con la empresa. Para eso, usá los canales de comunicación oficiales, como su página web, redes sociales como Instagram, Facebook y Twitter, número de WhatsApp o 0-800, o mediante el correo electrónico.
Entre tanto, seguí disfrutando de hacer tus compras con libertad, y considerá los créditos Efectivamente, que podrían ayudarte a acceder a todo aquello que valorás.