Todos tenemos en Argentina derecho a la seguridad social. Es decir, a disfrutar de protección ante los distintos imprevistos y necesidades específicas que podemos encontrar a lo largo de la vida, desde el nacimiento hasta la vejez. Gracias a ello, al final de la etapa laboral, el Estado garantiza una jubilación.
Sin embargo, pese a este importante derecho, no siempre la jubilación mínima es suficiente para mantener el nivel de vida que veníamos llevando al trabajar. Por eso, aunque parezca todavía un momento lejano, es importante empezar a planificar con tiempo la siguiente etapa en nuestro camino.
¡Y ahorrar de cara a la jubilación, es un paso fundamental! Descubrí cómo hacerlo, con estas sencillas estrategias:
Separá mensualmente una parte de tus ingresos
Sabemos que, en un contexto de alta inflación, donde a veces llegamos con lo justo a fin de mes, la propuesta puede parecer un enorme desafío. No la deseches todavía.
Empezá por definir un porcentaje, aunque sea mínimo, para separar cada mes. Luego, revisá tus gastos frecuentes, en busca de posibles maneras de hacer recortes. ¿Podés aprovechar promociones en negocios locales? ¿Hay una segunda marca que te ofrezca la misma calidad de producto a menor precio?
Podés empezar de a poco y, con los años o en una situación más favorable, aumentar gradualmente el porcentaje de ahorro.
¿Mensual o semanalmente? La manera en que hacés las compras, puede ayudarte a ahorrar. ¡Mirá!
Olvidate de la tarjeta de crédito
Comprar con tarjeta y sólo pagar el mínimo, es un camino asegurado a intereses y deudas capaces de derribar hasta las más pequeñas oportunidades de ahorro. Hay una alternativa mejor: los créditos personales.
El crédito personal es una suma de dinero que los comercios de la red Efectivamente, ponen a disposición de sus clientes para financiar sus compras, y que luego se va devolviendo en cuotas. De esta manera, ayuda a disponer de parte del ingreso mensual para el ahorro, sin sacrificar deseos personales y ¡hasta ganándole a la inflación!
¿La mejor parte? Los créditos personales son muy fáciles de obtener. Basta con presentar el DNI y, según el perfil financiero de cada uno, se define un límite de crédito, disponible para hacer compras en el acto.
Planificar tus gastos es clave a la hora de ahorrar. Te contamos cómo hacerlo
Aprendé de finanzas, cada vez que puedas
Aunque ahorrar es un hábito saludable para la economía personal, implica simplemente, separar una parte de nuestro dinero para el futuro, sin gastarlo.
Existe, no obstante, una forma de hacer crecer tu dinero: invertir. Pero, si bien dar el paso puede ayudar a robustecer nuestras finanzas a largo plazo, requiere que nos hayamos educado primero, en distintas alternativas de inversión y sus riesgos.
Como ves, ahorrar se trata más de constancia que de cantidad. Por eso, aunque la jubilación esté todavía lejos, hay mucho que podés hacer desde ahora, para mejorar tu calidad de vida el día de mañana. ¡Manos a la obra!