< Volver
13 09 2021
|

Cancelar una deuda con la tarjeta de crédito a través de un préstamo

Si las deudas se acumularon, es momento de organizarse. ¡Encontrá consejos en esta nota!

La tarjeta de crédito es una herramienta que ayuda a llevar adelante la economía de una casa o de un negocio. Hacer pagos en cuotas o tener en cuenta la fecha de vencimiento para hacer compras y pagarlas más de un mes después son algunas estrategias que ayudan a organizar las cuentas.

 

Pero a veces las deudas se acumulan y es necesario pensar una manera de ordenarlas para poder salir de un círculo en el que se sumen intereses de más.

 

En esta nota te contamos cómo podés cancelar una deuda con la tarjeta de crédito a través de un préstamo personal y por qué es conveniente hacerlo para ordenar los números.

 

¿Cuáles son las opciones para cancelar una deuda de tarjeta de crédito?

Revisemos cuáles son las distintas maneras de encarar una deuda que se haya acumulado en una tarjeta de crédito.

 

La opción que toma mucha gente es pagar el mínimo que cada mes exige la tarjeta de crédito y el resto hacerlo en cuotas. Este camino alarga el tiempo que demorás en salir de la deuda lo que significa que vas a seguir sumando intereses y costos. 

 

Otra posibilidad es pagar un poco más que el mínimo. Es una opción intermedia, vas a ir reduciendo tu deuda con la tarjeta lentamente. 

 

La tercera, la que te sugerimos, es pedir un préstamo y cancelar la deuda de una vez, es una estrategia rápida y efectiva para organizar tus cuentas. 

 

Pasar a pagar sólo el préstamo con las condiciones claras que acordás al tomarlo te va a ayudar a ordenar tu presupuesto mensual y va a aliviar los nervios que genera una deuda que crece con una tarjeta de crédito.

 

 

Otros consejos simples para ordenar tus cuentas 

 

Para evitar que las cuentas pendientes vuelvan a complicar tu economía, podés seguir estas recomendaciones sencillas:

 

1- Registrá tus gastos fijos: más allá de que tengas claro cuánto pagás de impuestos, servicios, supermercado y todos los otros gastos que tenés que afrontar mes a mes, es importante anotarlos. Podés hacer una planilla en tu computadora o un listado en papel. Lo importante es que tengas a la vista claramente cuánto suma y así definir qué parte de tus ingresos tenés que destinar a esto. 

 

2.- Aprovechá los descuentos y beneficios: cuando puedas optar por un crédito personal para hacer una compra o tengas algún descuento, no lo dejes pasar. Estos pequeños movimientos de todos los días generan, en el largo plazo, un importante ahorro.

 

3.- Ponete un objetivo: seguro hay algo que quisieras comprar, quizás hacer un arreglo en tu casa o un viaje que tenés pendiente. Fijalo como objetivo para organizar tus cuentas. Con algunos ajustes en tus gastos del día a día y sumando un pequeño préstamo, esos planes están a tu alcance. 

 

¿Tenés una deuda con tu tarjeta de crédito? Hacé click acá, pedí tu préstamo personal y cancelala. ¡Vos podés!